12 de gener del 2016

Realpolitik nº3: El grupo propio: Un compromís

La resaca del presidente de Cataluña salvado por la campana parece que se asimilirá por parte de los partidos autoproclamados constitucionalistas con un pacto para controlar la mesa del Congreso que llevaría a Patxi López a la presidencia de la cámara baja. Curiosa carrera la de este socialista vasco que, si se confirma este dato, siempre habrá accedido a sus cargos representativos más relevantes por los votos del PP, como lehendakari y como president del Congreso ahora.

Este posible acuerdo para la conformación de la mesa del Congreso entre PP, PSOE y Ciudadanos, pondría a Podemos ante su primera tesitura, puesto que dejaría sin aprobar los cuatro grupos parlamentarios que reclama. Un problema importante para los correligionarios de Pablo Iglesias, especialmente para sus socios valencianos de Compromís que llegaron a la coalición tras un proceso de votaciones demasiado estrambótico y jurando y perjurando que se alcanzaría el grupo propio. De hecho, en un último intento por conseguirlo, Carolina Bescansa, la negociadora de Podemos, habría renunciado tanto a las subvenciones como a los tiempos de intervención en los debates, de manera que los convertiría en meros instrumentos estéticos para cumplir promesas, pero sin ningún valor a la hora de defender los intereses de los valencianos. Todo un compromis(o).

Hablando de compromisos valencianos, existe otra formación política valenciana que parece que se enfrentará a ellos en los próximos días. Carolina Punset tiene que decidir si deja Les Corts Valencianes camino de la eurocámara o permanece como portavoz del grupo parlamentario. Su salida destaparía el juego por su sucesión que ya se ha iniciado sotovoce. Las aguas naranjas se ensuciarían orgánicamente con estas luchas internas, si se sucedieran.

El efecto mariposa de la decisión de la CUP ya se ha iniciado sólo queda esperar cuáles son las repercusiones

(Y ampliando, que es gerundio) La mar rizada de Ciudadanos es marejada en Podemos que pierde una diputada, a Cova Peremarch que no ha renunciado a su acta de diputada en Les Corts pese a ser expedientada por el partido morado. El grupo mixto empieza a tener inquilinos a sólo seis meses de iniciada la legislatura a sabiendas que tendrá más ocupantes. Está visto que esta señora hablaba de regeneración política como eslogan, al igual que el de hacienda somos todos

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